Lo prometido es deuda.
El año pasado escribí un artículo, mencionando que el cambio de constitución impulsado por la bancada oficialista, era más un feeling que una necesidad. En dicho artículo, mencione distintas razones por las cuales cambiar totalmente la constitución, sería algo contraproducente para nuestro país. Dentro de los argumentos que mencione resaltos los siguientes: (i) La poca solidez de nuestra democracia, (ii) La falta de clase política o la renovación de la misma, (iii) La desconfianza en nuestras instituciones, (iv) La falta de información de la ciudadanía.
Como señale en el artículo antecesor a este, no santifico nuestra constitución, más por el contrario, considero que es necesario reformar ciertos aspectos de la misma por el bien del Perú.
Sin embargo, salta en mí una pregunta, que considero refuerza mi tesis de que el cambio de constitución es solamente un sentimiento más que una necesidad ¿Qué sucedió con la bancada oficialista, porque ya no escuchamos más sobre el cambio de constitución? ¿Será que la idea tan defendida por Perú Libre y sus partidarios (Vladimir Cerrón, Bermejo y Bellido, etc) está siendo ahogada entre tantos escándalos mediáticos del presidente Castillo? Yo creo que sí. Los escándalos de Bruno Pacheco y el dinero encontrado en el baño de palacio, así como las clandestinas reuniones del Presidente en la casa de Breña con al menos un proveedor del estado, ha terminado en sumergir el feeling de una posible asamblea constituyente y por lo tanto el cambio total de la constitución.
Asimismo, otra causa del olvido de la conmoción revolucionaria de cambio de constitución, es que, el sentimiento se ha ido desvaneciendo; y esto se debe también a que el partido (Perú Libre), que al principio veíamos cohesionado, se ha debilitado a causa de sus diversas luchas internas, hecho que no debería suceder si persigues una finalidad tan grande.
Ahora bien, suelto una pregunta al aire ¿Perú Libre es un verdadero partido político? Yo creo que no y ese también es el motivo, de que su causa haya fenecido. Perú Libre, es solamente una agrupación política de izquierda comunista, antisistema, los cuales se aventuraron en un proyecto político básico y que el inicio de su proyecto emocional y para llamar la atención mediática, fue propugnar la asamblea constituyente. Pero es claro, el núcleo de ataque de un antisistema es la constitución, proponer su cambio y en el ínterin destruir al estado y sus instituciones.
Perú Libre, no sabe, ni conoce los principios fundamentales de un partido político, como la lealtad, la disciplina, el principio de autoridad, entre otros, que son básicos si persigues una causa tan profunda y sustancial.
Sabemos, que la reforma constitucional es necesaria, pero necesita de un proyecto programático, transversal institucional y democrático. Es imposible, pensar en cambiar la constitución de un día a otro, con un proyecto meramente pasional.
Ahora bien, estoy casi seguro de que no habrá ninguna asamblea constituyente, también estoy seguro que debido a la debilidad institucional de Perú Libre, este terminará desapareciendo; pero de lo que estoy más seguro, es que a nuestro País le esperan cuatro años de incertidumbre e inestabilidad a causa del desconocimiento y la brecha educacional.